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Actualidad

Las tasas de mortalidad del salmón preocupan al grupo de bienestar animal

La empresa New Zealand King Salmon ha revelado una tasa de mortalidad de la biomasa del 42% para los salmones que cultivaron en zonas de aguas cálidas.

En el caso de los salmones remolcados a aguas más frías, la tasa de mortalidad de la biomasa fue del 37%.

Los datos se publicaron en su informe financiero correspondiente al año que finalizó el 31 de enero de 2022.

En la actualidad, New Zealand King Salmon gestiona el riesgo de mortalidad de los peces repoblando los lugares más cálidos con una baja densidad, vigilando activamente la salud de los peces y manteniendo regímenes adecuados de limpieza de las redes.

La directora de campañas de SAFE, Anna de Roo, afirma que se trata de un desastre para el bienestar de los animales, y que si esto le ocurriera a las vacas o a los cerdos habría investigaciones y procesamientos.

Dice que los peces de piscifactoría necesitan un código de bienestar para empezar a abordar el terrible trato que reciben los peces en las piscifactorías.

El verano pasado, New Zealand King Salmon realizó 160 viajes al vertedero de Blenheim para arrojar 1.269 toneladas de salmones muertos.

Actualmente tiene presentada una solicitud de autorización de recursos para abrir más granjas.

Argentina prohibió la cría de peces el año pasado y De Roo afirma que Nueva Zelanda debe estudiar la posibilidad de prohibirla también.